La vista es uno de los sentidos más importantes, nos permite conectarnos con el mundo y ver todo lo que existe a nuestro alrededor. Los ojos son órganos muy sensibles, que al estar expuesto a cambios constantes de luz, radiación UV y la luz azul de monitores de computadora y pantallas de celulares, pueden sufrir de alguna afectación o daño. Por ello es importante acudir con un oftalmólogo Mérida regularmente para el cuidado de sus ojos.
Al igual que con la salud general, se debe acudir con un oftalmólogo al menos una vez al año, en especial si se está expuesto constantemente a dispositivos con luz artificial que pueden afectar su vista. El realizarse un examen integral permite detectar los principales problemas oculares y determinar un tratamiento oportuno que evite complicaciones a largo plazo.
Un examen integral incluye pruebas de agudeza visual, un estudio del fondo del ojo y diversos exámenes según cada paciente amerite, con la finalidad de prevenir enfermedades oculares graves. Si bien los principales problemas de la vista suelen aparecer con la edad, en cualquier etapa de la vida pueden estar expuestos a algún padecimiento que afecte su visión.
Revisiones oftalmológicas por etapa de la vida
Existe una amplia variedad de padecimientos que pueden manifestarse en los ojos, los cuales pueden ser de dos tipos: congénitos o degenerativos. Estos últimos son los más comunes, y pueden comenzar a mostrar síntomas desde la infancia. En los niños más pequeños, las visitas con un oftalmólogo tienen el objetivo de prevenir el desarrollo del ojo flojo o ambliopía, que es la pérdida de visión en un ojo, provocada por la falta de uso, así como tratar el estrabismo desde los primeros meses de vida.
Asimismo, identificar durante la infancia pueden aparecer los primeros defectos refractivos, como la miopía, que afecta la visión de lejos con una correcta vista de cerca, la hipermetropía, que genera problemas de visión a distancias cortas; y el astigmatismo, el cual hace que se vean imágenes poco nítidas tanto de lejos como de cerca. Estos defectos son los principales causantes de una mala visión que puede dificultar las actividades cotidianas de los niños y se refleja en su rendimiento académico al grado de que se estima que entre el quince y el 30 por ciento del fracaso escolar se debe a problemas de visión. La mala caligrafía, las faltas de ortografía o la dificultad para leer son consecuencias de problemas de enfoque o de percepción; estos problemas son muy difíciles de detectar sin la ayuda de un oftalmólogo Mérida.
En la adolescencia y la juventud, alteraciones refractivas son más frecuentes que en la infancia, por lo que deben acudir con un oftalmólogo para compensarlas con gafas o lentes de contacto. A partir de los 18 años, los defectos refractivos comienzan a estabilizarse y se puede optar por una solución definitiva para corregirlos, como una cirugía láser, la cual se recomienda realizar después de los 21 años, este tipo de problemas y padecimientos son fáciles de diagnosticar con un examen rutinario, que consiste en pruebas de agudeza visual con la lectura de una tabla a distancia, y un foróptero que el oftalmólogo coloca y cambia las lentes mientras le pregunta al paciente cómo ve las letras.
Después de los 40 años la lista de problemas oculares que se pueden sufrir ya aumenta, esto se debe a que con el envejecimiento el globo ocular sufre cambios, como son:
Todos los padecimientos en las distintas etapas de la vida pueden prevenirse y corregirse con una detección temprana, evitando problemas visuales e incluso la ceguera permanente. Por ello, es de suma importancia que visiten un oftalmólogo Mérida al menos una vez al año y cada que tengan problemas en la visión que no estén relacionados con otros padecimientos.
En el Instituto de Enfermedades y Cirugía Ocular IECO, encontrarán a los mejores especialistas que les brindarán una atención integral con las mejores técnicas y herramientas innovadoras para el tratamiento de los padecimientos oculares. Visítenos en nuestra clínica en Mérida, donde con gusto los atenderemos, pueden agendar una cita vía telefónica.